¿Qué puedes hacer si tu hijo adolescente te ignora?

La callada por respuesta. Como hablar a una pared. Esto es lo que se encuentran muchas madres y padres cuando hablan a sus adolescentes, y ni siquiera hace falta que se trate de algo serio, de una orden, de algo que no les gusta… Es, simplemente, que no contestan. Que ni reaccionan. ¿Qué hacer cuando un hijo adolescente te ignora?

Una mala noticia: igual que sucede con muchos otros asuntos relacionados con la adolescencia, el que los adolescentes ignoren a sus madres puede atribuirse parcialmente a la evolución de su cerebro. 

La explicación es sencilla; para “volar del nido”, que es el objetivo de esta etapa vital, los adolescentes necesitan ser atrevidos, volcarse hacia lo novedoso, interesarse por lo nuevo. Y esto también sucede con respecto a las voces.

Pero, evidentemente, que sea comprensible no significa que siempre esté bien. Ignorar a alguien, de determinadas formas y en determinadas circunstancias, es una actitud pasivo-agresiva, una forma de manipulación que no debes aceptar. 

Así que el único modo de que tu hijo adolescente deje de ignorarte es encontrar el equilibrio entre entender por qué lo hace y ponerle límites para que no se exceda. Exactamente igual que cuando tenía dos años y quería trepar por las estanterías. 

¿Por qué tu hijo adolescente te ignora?

Tu hijo adolescente tiene una razón neurológica para ignorarte.

Empezaremos con algo que parece un chiste pero es un estudio universitario: en mayo de 2022, el Journal of neurosciencie publicó los resultados de una investigación en neurociencia de la Universidad de Stanford. ¿Su conclusión? El cerebro adolescente presta más atención a las voces no familiares que a la voz de la madre.

Los investigadores observaron que en los cerebros de los niños pequeños se activa, al oír la voz de la madre, el sistema de recompensa y de reconocimiento social; en los de los adolescentes, este sistema se activa al escuchar voces desconocidas, pero no la de la madre. 

La prueba definitiva de que los adolescentes se “vuelven sordos” a la voz de la madre.

Pero puede, además, que tu hijo adolescente esté ignorándote de forma consciente, para castigarte, por una de estas razones: 

• Siente resentimiento hacia ti

Quizá tu actitud (en este momento o en otro) ha herido a tu adolescente: siente que no le has tratado bien, que has dado más privilegios a su hermano, que le has criticado, que no te has puesto en su lugar cuando lo necesitaba… 

El adolescente resentido siente dolor, y a menudo crea un muro para evitar sentirlo de nuevo.

• Piensa que invalidas sus ideas

Algunas madres y padres, por miedo, por puro perfeccionismo o incluso por prisa, se lo “dan todo hecho” a sus hijos: aunque puedan hacerlo por sí mismos les preparan la mochila, les visten, les dan de comer…

Al llegar a la adolescencia estos padres, muchas veces, dan consejos no pedidos, que hacen que los hijos se sientan infravalorados y… Acaben cerrándose en banda a cualquier cosa que les digan.

• Siente que ignoras sus límites

Los niños pequeños tienen deseos de privacidad, pero les gusta compartir tiempo con sus padres, contarles lo que les sucede… 

En los adolescentes, la necesidad de privacidad es mayor. Si entras en su habitación sin llamar a la puerta, miras en sus cajones o insistes en hacer preguntas que no quiere responder… Es fácil que se sienta agredido y acabe “pasando” de ti. 

¿Qué hacer cuando tu hijo adolescente te ignora?

Sabiendo que puede deberse al proceso de madurez cerebral que está viviendo y que, por tanto, no siempre que tu hijo te ignora lo hace aposta.

Educar no tiene receta pero, si la tuviera, diríamos que es un equilibrio entre conocimiento de la etapa evolutiva, comprensión, serenidad y firmeza. Si necesitas compañía en este camino, apúntate ya a la 13ª edición del Círculo de la armonía materna, donde te cuento todos mis secretos para disfrutar de la etapa adolescente. 

Me apunto al Círculo de la armonía materna.

• No te lo tomes de forma personal

Este podría ser un buen mantra para familias con hijos adolescentes: no es contra ti. Si te lo tomas de forma personal, entrarás en una lucha de poder, y el objetivo educativo se perderá por el camino. 

Esto no significa que no debas decirle a tu hijo adolescente que su actitud te ha molestado u ofendido, solo que debes intentar hacerlo con serenidad, dejando tu ego herido a un lado.

• Si le quieres hablar, quita distracciones

El móvil, la tele, la consola… Demasiados objetos pueden robar la atención de tu adolescente cuando le quieres hablar. No se trata de que se lo apagues todo de golpe, pero sí de que le pidas que levante un momento la cabeza del móvil o (si no hay prisa, que suele ser el caso) que te avise al terminar la partida, que tienes algo que decirle. 

• Ve al grano

La atención de tu adolescente es un bien escaso, así que aprovéchalo. Dile lo que necesitas de forma clara y concisa, sin perderte en justificaciones o argumentos que no vengan al caso. 

Algunos adolescentes son muy habladores, pero casi ninguno lo es todo el tiempo. Si en otro momento tiene ganas de charlar, no te preocupes, que te lo hará saber. 

• Ten cuidado con el tono

Si le dices a tu hija adolescente “ay, es que no puedo contigo”, seguramente desconectará antes de que hayas terminado la frase.

Evita usar el tono victimista y el reproche, aunque tengas que recordarle que hace tres días que tiene su ropa limpia por guardar. La comunicación asertiva te ayudará en esta tarea.

• Permítele que se tome su tiempo

A veces tu hijo adolescente no te ignora, pero no tiene muy claro qué decirte, o necesita pensar mejor cómo articular su respuesta. En esos casos lo mejor es darle espacio.

Lo ideal sería que te lo pidiera de forma educada pero, aunque no sea así, es mejor que no vayas detrás exigiendo respeto. Tendrás tiempo para ello.

• Estate disponible para la terminar la conversación

Tu hijo adolescente debe saber que, aunque te haya ignorado mientras le hablabas, vas a estar ahí para terminar la conversación cuando sienta que ha llegado el momento. Que no le vas a rechazar. 

Si te ha dejado con la palabra en la boca de mala manera, nuestro consejo es terminar primero de hablar lo que sea necesario y, ya al final, explicarle que te has sentido mal cuando se ha marchado de ese modo. 

• Pídele respuesta inmediata

Si no se trata de una gran conversación sino de un recordatorio, o de algo que necesitas (“no te olvides de bajar a por pan”), acostúmbrate a pedirle un feedback para saber que te ha escuchado. 

No uses el “¿me has oído? ¿Qué he dicho?”, pues resulta agresivo. Hay otras estrategias: pregúntale si va a bajar a la panadería antes o después de los deberes, si se acuerda de cuántas barras comprar… Algo que le obligue a una respuesta desarrollada.

• Asegúrate de que tiene otros adultos en quien confiar

Si tu hijo adolescente te ignora, a veces lo mejor que puedes hacer es retirarte.

Si tienes una amiga, un hermano o una prima en quien ambos confiéis, favorece esa relación, porque quizá esa persona pueda darle a tu hijo los consejos que no quiere escuchar de tu boca.

• Descarta otros problemas

En ocasiones, los adolescentes no hacen caso por una razón fisiológica: un problema de oído no detectado o una condición que afecte a la atención o a la memoria, como el TDAH.

Si ves que la conducta se repite en diferentes entornos (en el instituto, en el equipo deportivo, en casa…) acude al pediatra para asegurarte de que no hay problemas. 

Cuándo preocuparte si tu adolescente no te hace caso

Que una niña deseosa de compartir tiempo contigo se convierta en una adolescente que te evita por el pasillo entra dentro de lo esperable.

Pero en algunos casos puede ocultar un problema más grave.

Si tu adolescente que ha dejado de confiarse a ti tiene amistades, aficiones, y ni su actitud ni su rendimiento en la escuela o actividades extraescolares ha cambiado mucho, estás ante un caso de adolescencia normal. Asegúrate de que te escucha cuando lo necesitas y confía en que, con una actitud comprensiva pero firme por tu parte, esto también pasará.

Si tu adolescente, además de ignorarte, te trata con hosquedad, pasa mucho tiempo sin dirigirte la palabra o emplea sus silencios como chantaje, probablemente no sea nada preocupante, pero sí debes actuar para corregir su actitud.

Pero si tu adolescente parece estar totalmente aislado, si le han dejado de interesar sus aficiones infantiles pero no las ha sustituido por otras, si parece apático y sus resultados escolares son preocupantes… Entonces te aconsejamos que hables con un especialista.

Cuéntame, ¿tu adolescente te ignora? ¿Qué haces al respecto?